Proyectos 2 grupo B 2023-2024/Del Valle Sánchez, Laura

LA CASA, EL HABITANTE Y EL LUGAR. PROYECTO II

PLANIMETRÍAS

PLANO DE SITUACIÓN

PLANO DE ACEQUIAS

ÁMBITO DE ACTUACIÓN

PRIMERAS IDEAS

LEVANTAMIENTO 3D

CONTEXTO HISTÓRICO

LOS CULTIVOS EN LA VEGA DE GRANADA

La Vega, desde sus orígenes, siempre ha sido rica en árboles frutales, tales como 'Magnolia grandiflora', 'Granado', 'Níspero', 'Morus alba' ... y en cultivos como los cereales, el olivar, los viñedos. Tal es así, que la población granadina se asentaba en La Vega con construcciones como los Cármenes, ligadas a un patio o jardín con el huerto siempre presente, que daban al cultivo un carácter de perpetuidad. Ya en el siglo XVIII, los cultivos cambian por el lino y el cáñamo, que juegan un papel importante en la economía del reino, hasta la gran conocida revolución de la remolacha, en la que empiezan a levantarse fábricas especializadas en el cultivo de la remolacha, determinante en Granada, con construcciones tales como La Azucarera de San Isidro, con gran carácter socio-cultural. Su gran apogeo finalizó, llevando a muchas fábricas a la ruina, y haciendo el cambio por el cultivo de tabaco, interés cultural en Granada debido a sus característicos secaderos de tabaco que se extienden por la zona. Su cultivo fue en ascenso hasta que, debido a los niveles sanitarios que tenían que alcanzar para su venta a posteriori, la forma de cultivar, y los ilegales asentamientos y construcciones que se están realizando en La Vega, el cultivo de tabaco fue en decadencia, hasta su reemplazo por el cereal.

ARQUITECTURAS DOMÉSTICAS

LA CASA IMAGINADA. PROYECTO I

MEMORIA DE PROYECTO

El proyecto ‘Mi casa soñada’ tiene como finalidad el estudio de ‘La Vega granadina’ para su posterior intervención, en el que proyecto y contexto agrícola van de la mano. Dicho proyecto trata de proponer un lugar donde poder establecer una conexión directa con el entorno de la Vega. En primer lugar se ha indagado en el territorio propuesto, tomando unas primeras impresiones, para poder establecer un análisis, tanto histórico, como socio-cultural, el cual nos ha dado las claves para la realización de dicho proyecto. Se plantea un espacio sin barreras, en el que se pueda disfrutar del paisaje, un espacio sensorial, donde sólo los sentidos entran en juego, un lugar para relajarse y experimentar con lo que se tiene alrededor.

PROPUESTA INICIAL

Se ha planteado como propuesta, la creación de un espacio 'efímero', emulando a los secaderos de la Vega granadina. Los secaderos de tabaco tradicionales, como son los que están hechos con madera, están planteados de manera que puedan ser retirados del sitio sin causar un mínimo daño al terreno, es decir, que este siga siendo fértil para poder cultivar en él. Además, se han seleccionado los materiales del lugar, que tendrán un mínimo impacto con respecto al terreno. De esta manera, se ha planteado una estructura mediante pilares de madera que sujetarán un anillo central por el cual estarán unidos los tensores, formando una malla, que aguante el peso de todos los palos. En cuanto a las sensaciones que se pueden experimentar en este espacio, entran en juego la luz y la sombra como conceptos clave, un espacio sin barreras donde se pueda sentir el terreno de la manera más pura y directa posible.

PLANIMETRÍAS

MODELADO 3D

IMÁGENES FINALES

Como conclusión al proyecto, se ha creado un espacio al aire libre, sin barreras arquitectónicas, en el cual se puede disfrutar del entorno y la simplicidad de La Vega. Basándonos en las construcciones típicas de la zona, como son los secaderos de tabaco, y en la cantidad de vegetación que la ronda, se ha propuesto un proyecto en el que las ramas de los árboles sirven como soporte horizontal para protegernos de la luz directa de los rayos solares. Dichas ramas están dispuestas en semejanza a la tradición de la labranza en los secaderos de tabaco, permitiendo el paso de la luz solar indirectamente, creando un juego de luces y sombras. Además de ello, entra en juego la ventilación, accesible por todos los puntos. Para crear una base que proteja del frío, se ha socavado el terreno a una profundidad de -50 cm, permitiendo al usuario poder acobijarse del viento más fuerte, que a su vez permite tumbarse en el terreno y poder así contemplar las estrellas. La estructura que sujeta a las ramas, dispuestas entre sí mediante tensores creando una malla reticulada, está compuesta por cuatro pilares de 30x30cm dispuestos alrededor de su base.