Monografico de Proyectos 2024-2025/MARICHAL
Clase 1 - Martes 17/09/2024
¿Es momento de un cambio de mentalidad?
Cuando la modernidad tocaba la puerta, muchos conservacionistas prefirieron ignorarla, sin embargo, autores como Marshall Berman en su libro "Todo lo sólido se desvanece en el aire: La experiencia de la Modernidad" comenta las fases para que se diera este hecho y que, de todo este cambio, nace un hombre individual guiado por el torbellino de emociones intentando encontrar su camino y así ir juntos a la modernidad, Marshall escribe:
“Tan ardientemente como Marx, (Nietzsche) afirma su fe en una nueva clase de hombre –el hombre de mañana y pasado mañana – quien, en oposición a su hoy, tendrá el valor y la imaginación para crear nuevos valores necesarios para que los hombres y las mujeres modernas se abran caminos a través de los peligrosos infinitos en que viven.”
Es decir, que esperaba que los hombres y mujeres pudieran entender los efectos de la modernización y el modernismo que los seguía para así entender su ejercicio como personas modernas, no es más que la experiencia de vida -de la vida misma-. ¿No es entonces lo que deberíamos plantearnos? Estamos entrando en una nueva etapa donde lo que pensábamos se está desvaneciendo.
Por lo tanto, como personas, futuros profesionales deberíamos enfocar nuestros esfuerzos en responder a las crisis actuales en el planeta. Quizás teniendo en cuenta la agenda 2030 o las nuevas "ciudades resilientes" que no buscan sino elementos que las ayuden a responder a los cambios climáticos. No creo que la respuesta sean cubos que pueden contener una ciudad y sobrevivir por si solos o líneas en el desierto por km y km de territorio que contengan todos los servicios para vivir de la mejor manera internamente. Y entiendo que estas son propuestas utópicas de ciudades, pero seguimos con la misma premisa de tomar territorio para construirlo. ¿Por qué no pensar en lo que ya está construido?
Más que construir, pensar en la deconstrucción. En la edificación como un ente viviente que pasa por todas las fases: nacer, vivir, morir. Dónde una edificación se pueda construir, pero su degradación sea ecológica también. Si el mundo está cambiado, la arquitectura tendrá que cambiar con él, dependerá entonces del conglomerado de participantes relacionados a este ámbito, desde políticos, ingenieros, profesores, estudiantes tomar el asunto en sus manos y actuar.
Ana Marichal 22/09/24
Clase 2 - Martes 24/09/2024
El nuevo imago mundi
“En esta era de producción pasiva, cuando todo debe ser planificado y diseñado, el diseño se ha convertido en la herramienta mas poderosa con la que el hombre puede dar forma al ambiente (y por extensión a la sociedad y a él mismo). Esto requiere de una gran responsabilidad social y moral del diseñador” Victor Papanek. Diseño para el Mundo Real 1970
“(…)dar forma al ambiente”. ¿No debería el nuevo imaginario repensar esta frase? Mas allá de moldear el ambiente a nuestras necesidades. ¿No debería ser que debemos partir de ideas que asuman las diferencias de los lugares y poder responder a ellos?
La arquitectura no es un “arte” aislado. Se puede recordar lo que decía Vitruvio en Los diez libros de la arquitectura “… el arquitecto debe ser una persona culta, conozca de literatura, (…) domine el arte del dibujo, (…) la aritmética, (…) que conozca a fondo la historia (…) filosofía (…,) música (…,) leyes”.
Partiendo de esto, los arquitectos deben ver mas allá de solo un elemento que se va a construir. Mucho más allá de proyectar un objeto aislado que podría tener, o no, una vinculación con su alrededor. Se debe proyectar una relación. Que esta nazca en su totalidad de un análisis social, climático y del ciclo de la vida de los materiales. Como esto influirá tanto a la zona donde se plantea como a sus alrededores. Entender las cantidades de materiales y energía utilizados en la extracción de recursos naturales, su explotación y la destrucción o reciclaje de los residuos que se emplearán.
Por lo tanto, es momento de parar un momento y repensar lo que hemos creído hasta ahora. Al inicio del artículo se cita a Papanek, quien comenta que el diseño es el arma más poderosa que tiene el hombre. ¿Lo usarás para seguir construyendo en donde no se puede más?
Si deforestarán toda el área para a construir un conjunto hotelero ¿Qué se podría hacer con esos árboles? Junya Ishigami, en el parque de agua, plantea replantar esos árboles en una zona que antes era arbolada pero también se deforestó para tener sembradíos de arroz. Usando los caminos del agua, haciendo un catálogo de los árboles y plantadolos nuevamente según un estudio previo del suelo y la zona, generando nuevamente el microbioma que ahí existía. Donde lo importante no es el humano sino el ambiente, donde se diseña es en base a él y sus necesidades, generando un verdadero vínculo entre las personas y la naturaleza.
Ser un agente de cambio implicará pensar nuevas variables e implementarlas en el diseño ¿Dónde estoy?¿A qué escala veo siempre lo que veo?¿Qué juicios tengo de lo que me rodea?
El nuevo arquitecto debe conocer el pasado, para entender el presente e intentar plantear algo para el futuro.
Ana Marichal 28/09/24
Clase 3 - Martes 01/10/2024
Un recorrido hacia el cambio
Vemos el río en su estado final, lo que siempre ha sido. Una corriente de agua con flujo constante, cascadas, giros y vegetación nativa espontánea. Ese es objetivo final. Partiendo de un río completamente hormigonado.
Como se comentaba en los artículos previos, la modernidad y el pensamiento de “modelar el ambiente” donde es el hombre moderno quién se impone sobre la naturaleza, a veces, solo se posa sobre ella, pero sin realmente tomarla en cuenta. Si se piensa a profundidad no es algo meramente estético, es debido a este pensamiento que el cambio climático está en este estado tan crítico. Donde la naturaleza debe de obedecernos... aunque nosotros seamos parte de ella y necesitemos todos los recursos que ella aporta.
Hace un año estaba conversando con un arquitecto y una urbanista suecos que me contaban sus proyectos con fundaciones como Arquitectos por el Mundo Suecia. Y yo les preguntaba como se podrían llevar a cabo esos proyectos en Venezuela donde el mayor problema que hay es social, específicamente, en que las personas realmente no tienen un sentido de pertenencia por su región y los elementos que la componen. Aunque se construyen parques, paseos, edificaciones, centros culturales, entre otros, estos se vandalizan, invaden o degradan rápidamente. Si ya no me beneficia, no lo necesito -aunque alguien más si lo necesite-. Es una inquietud que de forma recurrente pasa por mi mente. Y es que no es un problema solo de este país, sino algo generalizado por la universalidad que ahora está presente gracias a la globalización, que nació de la industrialización y el capitalismo. ¿Cómo volver a ser humano? Si toda la sociedad actual parte de conceptos modernos como la casa como la máquina para vivir, el deshumanizar al humano y todas sus necesidades más allá de las impuestas por un sistema.
Ahora… ¿es el hombre quién se impone sobre el río? O es el río, la naturaleza, el sistema que debe regir todos los ámbitos del planeta. Por muchos años intentaron sobreponerse, el hombre como elemento único y aislado, que actuaba sin pensar en las consecuencias de los actos -bueno, todavía sucede más de lo que debería- aunque estos fuesen a repercutir de una forma negativa.
Es volver a tener conciencia de el mundo que nos rodea. Un paso más para sentirnos parte de un cambio inminente que viene de las crisis sociales, climáticas y políticas, que se debe llevar por un camino donde lo más importante sea algo mas que nosotros mismos, sino lo que nos envuelve.
Ana Marichal 05/10/24
Clase 4 – Martes 08/10/2024
Redes Neurálgicas
La naturaleza está conformada por sistemas microscópicos complejos que se interconectan entre ellos para subsistir; dichos sistemas se pueden elevar de escala, o ampliar el lente, y aparece el sistema humano, un pueblo, una ciudad. Dichos sistemas, se interconectan entre ellos, por ejemplo, el sistema neuronal del cerebro conecta las neuronas por axones que son los que llevan los pulsos eléctricos y activan la neurona que se necesita en el momento, pulsos eléctricos que vienen de los ojos, oídos, gusto, tacto, un sistema complejo que trabaja en conjunto.
La sociedad humana tiene conexiones neurálgicas también, las decisiones, que son derivadas del razonamiento lógico y del concepto del ser/soy/estoy. Estas siempre van a incidir en otros de alguna manera, ya sea positiva o negativamente. Por ello, como nuestras decisiones afectan a otros, éstas deberían ser lo más éticas o moralmente posibles, es decir, que además de tomar decisiones en función a mi persona, se debe estar abierto a las propuestas que hace la vida y a las realidades de los otros.
¿Qué quiero decir con esto? Los humanos, al ser personas, no dependen únicamente de sí mismos sino también de los que lo rodean, al inicio son nuestros padres los que nos enseñan los valores e inician la formación, es el momento en el que recibimos y nos empezamos a apropiar del ser, configurando así lo que sería nuestra propia realidad; al volvernos adultos, seremos los nuevos distribuidores de este ser, para configurar así la realidad de otras personas; de esta manera, al existir este tipo de relación, debemos entender que todas nuestras decisiones están relacionadas, y no se puede ver algo como un caso aislado, ya que toda acción tiene una reacción inmediata, tanto en nosotros como en los que nos rodean.
Es por esto que, la decisión de construir una represa para los cultivos, ahora esta haciendo que no haya arena en las playas y estén retrocediendo ante el mar; es por ello que se tomó la decisión de que se construyeran tantos hoteles en playas por un boom inmobiliario y ahora están abandonados; consecuencias de decisiones pero que fueron tomadas sin ética -o una ética errada, para no ser tan extremista- pensando únicamente en la persona -o personas- beneficiadas, sin tomar en cuenta los efectos de estas acciones.
Entre todas las crisis que estamos viviendo actualmente, la medioambiental, energética, económica y política -que además son todas del humano porque son resultado de la sociedad- creo que de podría agregar una crisis, la de libertad. No me refiero a que estar entre las rejas en la cárcel, sino libertad mental, que no esta permitiendo que se vean las cosas que suceden con claridad o, mas bien, de una forma sesgada.
En la actualidad se vende la libertad como: hacer lo que tú quieras, cuando tú quieras y como tú quieras. “Para ser realmente libre y feliz debes escuchar a tu corazón y tus sentimientos, no pienses mucho las cosas” Esa frase y muchas más son las que escuchamos en la televisión, la radio, las redes sociales, entre otros medios de comunicación. Sin embargo, ¿es realmente cierto que la libertad solo se alcanza en un modo inconsciente? Una vida que se rige únicamente de las emociones y los sentimientos, de satisfacer los deseos actuales, sin darle importancia al futuro y a cómo te afectaran a ti ya otros tus acciones. ¿Eso es lo que te llevará a ser libre?
Tomar una decisión sopesada por la razón es libertad. El cómo yo me sitúo ante mis deseos y realidades, considerando las realidades externas. Para ello es importante incluir la ética, que no es mas que pensar que “mis derechos se acaban donde empiezan los tuyos”. Muchas personas han dejado entonces de razonar. Pereza mental , le dicen; se toman decisiones que pude que afecten inmediatamente como en 20 años tanto a una persona, como a una ciudad, a un país. El problema es cuando estas personas están en una posición de poder y son seguidos por personas que no tienen consciencia o que simplemente no quieren pensar… Las personas deben empezar a apropiar del ser nuevamente y dejar de ser guiados únicamente por sus deseos, la inmediatez y empezar a razonar.
Entiendo que todo esto forma parte de una utopía, igual que muchos de los temas en los cuales he reflexionado anteriormente, pero una persona comentaba una vez que las utopías no son para construirlas sino para tenerlas como una guía.
Ana Marichal 12/10/24
Clase 5 – Martes
15/10/2024
Corrientes futuras
Sabemos que el cambio climático es una realidad -aunque haya “mandatarios” que aseguran lo contrario- y como no se tomaron las precauciones necesarias -por intereses económicos, más que todo-, ahora se están viendo las consecuencias de esas decisiones. Nos preguntamos entonces ¿Es necesario una explotación masiva de todos los recursos del planeta?
La industrialización, el capitalismo y la sociedad del consumismo nos han traído hasta este momento, donde la naturaleza es el vasallo del hombre, comenta Savater A. en su texto “Utopía vegetal. De la impotencia a lo posible” así, ese pensamiento masivo nos trajo hasta donde estamos: al borde de la extinción de la vida sobre la tierra. No se ve mas allá de lo inmediato, sin pensar en las consecuencias. No se entiende que la naturaleza es un proceso, que se puede potenciar, si se tomara el tiempo de entender… sin embargo, seguimos construyendo sobre lo construido, sin tomar en cuenta las zonas con riesgos de inundaciones, incendios, que no irán más que magnificándose por el cambio climático.
Ante esta problemática se podría pensar en tres niveles de soluciones: adaptación, protección y retirada. Donde la primera se trata de proponer espacios inundables, entender la problemática y aprender a vivir con ella. Como el parque y reforestación urbana como como obstáculos geográficos para disipar tsunamis del arquitecto Alejandro Aravena en Chile. En la segunda solución se proponen elementos que puedan evitar los daños a construcciones y a la población, por ejemplo, aportes de arena en grandes cantidades, espigones o rompe olas, hasta las murallas anti-tsunamis que se hicieron en Japón, sin embargo, terminan siendo curitas en cortes profundos, soluciones que arreglan lo inmediato pero que no se piensan mantener en el tiempo, algunas hasta no pueden contener el daño o solo lo redireccionan. Por último, se encuentra la retirada, como dice su nombre, se basa en retirar los elementos que se puedan ver afectados; aunque parezca muy extremo, informe España donde sale menos relocalizar a las personas de la rivera del rio a los daños que se puedan causar con la inundación.
Hay que entender que lo más sostenible es el sentido común, que todo lo que ya está construido es útil y que el estilo de vida que llevan las personas también afecta al medio ambiente. Construir a las afueras de una gran ciudad es menos sostenible que renovar espacios que ya hay en ella. Ya que se consumirá más energía para construir a las afueras y no solo eso, sino que las personas que ahí habiten también tendrán que consumir mas para viajar a la gran ciudad a: trabajar, pasear, comprar, entre otras cosas. Por ello, mientras mas lejos de la ciudad, mas energía se consume y más insostenible.
Ana Marichal 20/10/24