Monografico de Proyectos 2025-2026/RICHARD MTRINIDAD

CLASE 02 - En la última clase, al compratir los proyectos de los alumnos internacionales fue interesante notar cómo la mayoría de las propuestas europeas se enfocaban en la reforma y refuncionalización, lo que refleja una mirada más sustentable hacia la arquitectura. Incluso en los proyectos concebidos desde cero se percibían inquietudes similares, muchas de ellas en línea con las preocupaciones expuestas en la primera clase, lo que muestra una coherencia en la forma de pensar el futuro de la disciplinaa. También conversamos sobre qué partes de la construcción resultan menos sustentables, y quedó en evidencia que la mayoría no lo tenía claro, algo que no puede suceder en nuestra formación. Opino que si queremos proyectar obras realmente sustentables, nuestras preocupaciones deben estar siempre respaldadas por conocimiento técnico que podamos aplicar de manera consciente en nuestras futuras prácticas profesionales.

CLASE 03 - En la última salida recorrimos el río Genil y fue interesante ver cómo al principio está totalmente controlado por el hombre, encajonado en hormigón, y de a poco se va naturalizando. Aprendimos que el río une dos biosistemas, uno a cada lado, y que donde más se naturaliza aparece mucha más vida: animales, vegetación, movimiento. Me hizo pensar en cómo desde la arquitectura tendríamos que buscar acompañar esos procesos naturales en lugar de forzarlos, generando espacios que convivan mejor con el entorno.

CLASE 04 - En la clase pasada hablamos de que la sostenibilidad de un proyecto se define sobre todo en la primera etapa, cuando se genera la idea y el enfoque. Me pareció muy interesante pensar que el 50% se resuelve en el proyecto, el 30% con estrategias y solo el 20% con acciones, porque muestra que la sostenibilidad no se trata solo de aplicar tecnología, sino de pensar bien desde el arranque.

También vimos que las prioridades deben ser primero ambientales, luego sociales y por último económicas, algo que muchas veces se invierte en la práctica.

Lo que más me llamó la atención fue el concurso de la Plaza España en Madrid, del grupo n’UNDO, donde propusieron no hacer una gran remodelación sino intervenir lo justo y necesario, priorizando lo imprescindible, deseable y necesario.

A partir de eso, investigué más sobre el estudio n’UNDO y encontré que trabajan bajo la filosofía de “No hacer, Rehacer y Deshacer”, buscando siempre minimizar el impacto y aprovechar lo existente. Tienen metodologías como el “Plan n’UNDO”, que se adapta a cada contexto (por ejemplo, Plan n’resta o Plan n’minimización), y proyectos donde aplican esta lógica de mínima intervención con máximo efecto. Me pareció una mirada muy coherente con lo que vimos en clase: ser sostenibles no es hacer más, sino hacer mejor y con sentido.

RESUMEN GRUPAL La sustentabilidad en la arquitectura implica pensar proyectos capaces de adaptarse al paso del tiempo y a los cambios del entorno, priorizando la convivencia con la naturaleza antes que su control.

Los proyectos de Noah y Francisco representan nuestra respuesta a la cuestión de la sostenibilidad. Al centrarse en la rehabilitación, muestran cómo la reurbanización de un espacio puede tener más valor que una nueva construcción. Como demuestran Lacaton y Vassal en la renovación de la torre Bois-le-Prêtre en París, es posible generar espacios interesantes y habitables a partir de estructuras existentes, evitando el derroche de energía y materiales —porque la mejor energía es la que no consumimos. En ese sentido, construir a partir de lo que ya existe, añadiendo y modificando, produce resultados más significativos y sostenibles que crear desde cero.

En el proyecto ubicado en Venecia, nos pareció muy acertado cómo se planteó el funcionamiento a largo plazo considerando la futura inundación del sitio. Esa decisión de aceptar el avance del agua en lugar de resistirlo refleja una mirada contemporánea y coherente con la idea del undo, entendida como deshacer ciertas lógicas rígidas para permitir nuevas formas de habitar.

En cambio, sin ser críticos, el proyecto de Eilyn buscó respuestas formales interesantes, aunque plantea una reflexión importante: hoy la cuestión ya no está en hacer forma por la forma. Curvas, grandes luces y volúmenes complejos suelen depender del hormigón, por lo que hablar de construcción sostenible también es hablar de forma. Imaginar una pared recta de adobe o paja puede ser más sostenible que una forma espectacular difícil de sostener.

En conclusión, todos estos proyectos proponen distintas miradas sobre la sustentabilidad: aceptar el cambio, reutilizar lo existente y repensar la forma como acto consciente, donde el undo y la moderación se vuelven verdaderos gestos de diseño responsable.