Diferencia entre revisiones de «Monografico de Proyectos 2025-2026/SIERRA A»

De Citywiki
Ir a la navegación Ir a la búsqueda
Línea 6: Línea 6:
 
[[Archivo:Actual y Propuesta Secciones.jpg|sinmarco|abajo]]
 
[[Archivo:Actual y Propuesta Secciones.jpg|sinmarco|abajo]]
 
[[Archivo:Croquis planta e ideas espigones.jpg|sinmarco]]
 
[[Archivo:Croquis planta e ideas espigones.jpg|sinmarco]]
  +
[[Archivo:Croquis Muros.jpg|sinmarco]]
 
   
   

Revisión del 21:22 11 nov 2025

Proyecto Antonella Sierra.png

Render Proyecto "Rupu ñi Antu".jpg Resumen Grupal AS.jpg

Plano General Idea Proyectual.png

Actual y Propuesta Secciones.jpg Croquis planta e ideas espigones.jpg Croquis Muros.jpg






Sesión 9 - 11.11.25

En esta sesión se organizaron las diferentes escalas de trabajo para comenzar a pensar, idear, diagramar y representar las propuestas surgidas tras la visita al lugar y su entorno. Las escalas permiten ordenar las capas de información del proyecto y clarificar las lecturas tanto del territorio como del interior de la Residencia de Tiempo Libre de Marbella. Me pareció interesante cómo las distintas propuestas abarcan dimensiones tanto verticales como horizontales.

En la escala territorial, la inclusión de la cultura y el patrimonio permite comprender el territorio más allá de una simple observación aérea. En la escala del entorno próximo, de la que formó parte, considero fundamental recuperar el uso peatonal, reintroducir la vegetación autóctona como parte del ecosistema urbano y la importancia del mar. Por su parte, las escalas interior y arquitectónica resultan esenciales para preservar, recuperar o intervenir los espacios, reconectando con lo que fue y proyectando lo que será en el futuro de la Residencia de Tiempo Libre de Marbella.

Esta parcela, que en su momento impulsó la urbanización del lugar, debe ahora continuar ese proceso desde una perspectiva ecosistémica y arquitectónica continua, sin barreras ni limitaciones.


Sesión Salida a Marbella - 05.11.25

Durante la conversación con Alberto y Javier, biólogos, se habló del sistema dunar protegido y su equilibrio ecológico. Presenta vegetación baja y resistente en la zona costera, seguida de arbustos y árboles en la parte alta, cercana a la zona residencial. Entre las especies autóctonas destacan el palmito, atrapamoscas y el lirio, mientras que entre las alóctonas se mencionaron el eucalipto, la acacia y el algarrobo. En la fauna hay aves pequeñas, camaleones, el loro argentino (invasor sin depredadores), mosquito tigre y fauna marina como almejas. Solo los jabalíes descienden desde la sierra, cruzan el riachuelo y se internan en el monte. Los pinos, aunque presentes, limitan el movimiento natural de las dunas.

La conversación permitió comprender cómo las especies introducidas pueden alterar la dinámica natural del sistema, resaltando la importancia de conservar el equilibrio ecológico del lugar.

Sesión 8 - 04.11.25

La cultura del paisaje como una construcción que une arte, naturaleza y arquitectura. El paisaje ha pasado de ser una representación estética en la pintura a convertirse en una forma de habitar e integrar lo natural dentro del espacio construido. Estas obras muestran que el paisaje no es solo una vista exterior, sino una forma de habitar que integra agua, vegetación, relieve y clima como elementos estructurales del diseño. Se destacó cómo ejemplos como la Casa Malaparte o los jardines de Capability Brown.

A esta reflexión se suma el concepto de “Floriciudad” mencionado en el artículo “Adiós a la sostenibilidad y hola a la alianza multiespecies” de Bernardo Gutiérrez. El pensador indígena Ailton Krenak, quien propone transformar las urbes en lugares permeables a la vegetación y a otros organismos, permitiendo que la naturaleza vuelva a ocupar la ciudad. Esta idea enlaza con la visión contemporánea del paisaje como un ecosistema vivo, donde arquitectura y ecología se unen para repensar nuestra relación con el entorno.


Sesión 7 - 28.10.25

En esta sesión se retomaron conceptos ya vistos y se profundizó en tres fases fundamentales dentro del proceso de un proyecto. Me pareció interesante cómo se planteó la idea de categorizar y avanzar paso a paso, destacando aspectos como el cuidado del espacio, la defensa de lo que se dice y se documenta. También se abordó la consolidación de un paradigma ecosocial, donde el enfoque resulta clave para que, al llegar a la etapa de implementación, el proceso previo esté bien estructurado, claro y enfocado. La idea del trabajo post-crecentrista me resultó muy significativa, ya que invita a mirar desde distintas disciplinas y a construir con una visión más amplia y sensible. Este enfoque ayuda a mantener coherencia y sentido en los proyectos que buscan recuperar, recontar y reutilizar, y me deja pensando en cómo aplicar estas ideas de manera más consciente en mis propios procesos de diseño.


Sesión 6 - 21.10.25

La revisión de la Ciudad Residencial de Marbella permitió reflexionar sobre la transformación de un proyecto moderno concebido para el bienestar colectivo y la integración con el paisaje. Pese a las tensiones entre su ideario y el paso del tiempo, la obra conserva un alto potencial para ser revalorizada desde enfoques contemporáneos, sin perder su identidad ni su vínculo con el entorno natural. El cierre y las problemáticas actuales abren una oportunidad para repensar su conservación desde una mirada crítica, patrimonial y ambiental.


Sesión 5 - 14.10.25

Trabajar a favor de la naturaleza, como decía Capability Brown, es proyectar desde el respeto por el ecosistema y sus propios ritmos. Es dejar que lo natural siga su curso, integrándose al diseño sin forzarlo, permitiendo que lo biológico y lo humano convivan en equilibrio. Renaturalizar no es imponer, sino acompañar los procesos del lugar, entender sus transformaciones y cuidar aquello que le pertenece. Solo así es posible recuperar y mantener lo que verdaderamente da sentido a un paisaje. Recuperar el ecosistema requiere una visión amplia del lugar, atenta a sus acontecimientos y problemáticas, con el fin de reconstruir y mantener aquello que es propio y adecuado para su equilibrio.

Resumen Grupal Proyectos

Como grupo, coincidimos en que los proyectos que logran adaptarse a lo existente resultan especialmente valiosos, ya que demuestran una actitud de respeto hacia el entorno y hacia los procesos previos del lugar. Esto pudimos visualizarlo en proyectos como el del Instituto Biomédico (Francisco) o la recuperación y reutilización del Complejo de Viviendas Sociales (Noah). Esta forma de proyectar reconoce que la arquitectura no siempre debe comenzar desde cero, sino que puede reformular, reutilizar y resignificar lo que ya está presente.

También destacamos la importancia del proyecto de la Bienal de las Aguas en Venecia (Lore), el cual promueve una mirada a largo plazo e incorpora la idea de que los espacios deben ser capaces de adaptarse a los cambios naturales y sociales. En este sentido, aceptar la naturaleza especialmente el comportamiento del agua como un elemento con el cual convivir, y no contra el cual luchar, se presenta como una visión necesaria.

En general, valoramos los proyectos que cuidan, estabilizan y mejoran el entorno, ya que aportan no solo a la sostenibilidad ambiental, sino también a la cohesión social y al equilibrio del ecosistema (Eylin). Asimismo, reconocemos la importancia de considerar las condiciones que el lugar entrega: sus factores humanos, ambientales, sociales y económicos, entendiendo que todo proyecto se construye desde una realidad específica. Un ejemplo claro de esto fue el de los Sub-valles de Mosa, en Bélgica, y también uno de los proyectos relacionados con un establo que no se encontraba en óptimas condiciones y lo que se proyecto fue reutilizar la estructura que este poseía para poder crear nuevos espacios de estudios para la población de esa ciudad (Thea).

Por último, nos parece fundamental tener en cuenta el componente social, tal como lo plantea el proyecto Rüpü Ñi Antü (Antonella), ya que consideramos que este aspecto es clave: define y marca profundamente la manera en que se concibe un proyecto. Creemos que este componente deberemos tenerlo muy presente al momento de desarrollar nuestro próximo proyecto de clase.

Como crítica constructiva, consideramos que sería interesante seguir profundizando en cómo las decisiones proyectuales pueden anticipar y acompañar los cambios del tiempo, fomentando una arquitectura que no solo responda al presente, sino que evolucione junto al entorno y las personas.


Sesión 4 - 07.10.25

En la actualidad implica reconocer la arquitectura como un acto ético y ecológico, donde diseñar requiere atender, escuchar y respetar la diferencia. El arquitecto deja de ser un creador absoluto para convertirse en un mediador entre las cualidades del territorio, las necesidades sociales y las dinámicas del ecosistema.

El cuidado del territorio supone reconocer sus propias cualidades y permitirle desarrollarse según su identidad, una idea vinculada al principio de isonomía, entendido como la igualdad de autonomía de cada lugar para desarrollarse tal como es.

Reflexionar sobre cuál es el paradigma desde el que proyectamos me llevó a comprender que, como arquitecta, asumimos un papel amplio y decisivo que comienza desde el origen mismo de la idea del proyecto. Reconocer ese paradigma implica cuestionarse a quién va dirigido, qué necesidades buscamos atender y desde qué mirada interpretamos el territorio y a quienes lo habitan.


Sesión 3 - 30.09.25

Lo visto en el Río Genil pone de manifiesto la tensión entre lo artificial y lo natural. La vida busca siempre un resquicio para desarrollarse: la vegetación se abre paso, el agua mantiene ciclos estacionales y el río continúa articulando ecosistemas. El río no desaparece como entidad natural, sino que se transforma y resiste, mostrando la resiliencia de los sistemas ecológicos. También invita a pensar en cómo nuestras intervenciones pueden acompañar y potenciar esa vitalidad, en lugar de reducirla.

Observar el cauce en sus distintas situaciones fue un ejercicio de lectura del paisaje, donde se hace evidente lo ecocéntrico, que reconoce el valor de la naturaleza en sí misma y el egocéntrico, que responde a las necesidades humanas inmediatas. Reconocer esto implica recuperar un “conocimiento ecológico” que muchas veces hemos olvidado. De esta experiencia me queda una enseñanza clave: la naturaleza y la arquitectura no deben leerse en oposición, sino en un diálogo permanente.


Sesión 2 - 23.09.25

La sostenibilidad no solo debe medirse en términos de funcionalidad, sino también en su capacidad para preservar y fortalecer las comunidades que ya existen. En este sentido, la rehabilitación de preexistencias se muestra como una respuesta vigente y necesaria, porque no solo restaura edificios, sino que reconstruye los lazos.

La verdadera sostenibilidad y urbanización se manifiesta en la capacidad y la gestión de un proyecto para adaptarse y mantenerse relevante a lo largo del tiempo. Sin esta adaptabilidad, cualquier intervención corre el riesgo de ser poco efectiva. Por lo tanto, es importante que los proyectos arquitectónicos no solo sean innovadores, sino que también se inserten de manera significativa en sus contextos sociales y ambientales.


Sesión 1- 16.09.25

Considero que la arquitectura debe entenderse como un proceso dinámico y flexible, enraizado en la noción del territorio y el lugar . Preguntas como “¿cómo se emplaza?” o “¿qué fue antes?” permite abrir y guiarnos una transformación acorde a una mirada sensible del espacio, reconociendo las fuerzas que ejercen el sitio, las personas y la naturaleza, y orientando así una respuesta responsable hacia el entorno.